La correcta implementación de la liquidación y el finiquito, tal como lo estipula la Ley Federal del Trabajo, son claves para trabajadores como patrones. Por ello los abogados laborales del despacho Diez de Bonilla Kuri y Asociados S.C. nos explican las diferencias más importantes para comprender la liquidación y el finiquito.
Dentro del ámbito de las relaciones laborales, dos términos sobresalen por su relevancia y a menudo por la confusión que generan: Liquidación y finiquito. De entrada, debes saber que no son lo mismo y conocer sus diferencias es muy importante.
Estos conceptos, esenciales en la Ley Federal del Trabajo, definen los cimientos sobre los cuales se edifica la terminación de las relaciones de trabajo, marcando un antes y un después en la vida laboral de los empleados. Su correcta diferenciación no solo es una cuestión de cumplimiento legal sino también de justicia y equidad en el trato a los trabajadores.
“El primer paso para entender las implicaciones de estos términos es deslindar claramente uno del otro. Para ello se debe toman en consideración lo que establece la Ley Federal del Trabajo. Mientras que la liquidación se asocia con compensaciones por terminaciones de contrato sin justificación válida, por lo que el finiquito se refiere al cierre de cuentas por el fin de la relación laboral, sin importar las circunstancias” Así lo explican los abogados laborales del despacho.
Ambos procedimientos son cruciales para asegurar transiciones laborales armónicas y justas, bajo lo establecido por las leyes laborales mexicanas.
La liquidación emerge como un derecho inalienable del trabajador frente a despidos que no encuentran asidero en causas justificadas. Este concepto abarca no solo los salarios pendientes y vacaciones no disfrutadas, sino también indemnizaciones significativas destinadas a mitigar el impacto del despido.
La Ley Federal del Trabajo estipula claramente los montos y condiciones de estas compensaciones, siendo la indemnización de tres meses de salario y la prima de antigüedad elementos clave en este cálculo.
Por su parte, el finiquito actúa como un acuerdo de conclusión, donde se saldan todas las cuentas pendientes entre el empleado y la empresa al término de la relación laboral. Desde salarios no pagados hasta vacaciones y aguinaldos proporcionales, el finiquito abarca un espectro amplio de compensaciones, aplicables bajo cualquier circunstancia de terminación, ya sea por renuncia voluntaria, finalización de contrato o despido justificado.
Aplicación práctica y momentos de otorgamiento: Entender cuándo y cómo aplicar estos conceptos, como liquidación y finiquito, son vitales para la gestión eficiente de los recursos humanos.
“Mientras la liquidación se reserva para escenarios específicos de despido sin causa justa, el finiquito se presenta como una constante en toda finalización de la relación laboral, asegurando la claridad y la finalización de obligaciones mutuas.” Así lo explican los abogados laborales del despacho.
El cálculo de la liquidación y el finiquito requiere de una metodología precisa, basada en el salario diario del trabajador. Esta precisión no solo garantiza la justicia en las compensaciones, sino que también protege a las empresas de posibles reclamaciones legales.
Es un ejercicio de transparencia y respeto hacia los derechos laborales que fortalece la relación entre empleadores y empleados. La implementación correcta y justa de la liquidación y el finiquito tiene un impacto directo en el clima laboral y en la reputación empresarial.
Estos procesos reflejan el compromiso de la empresa con los derechos laborales y contribuyen a la percepción de un entorno de trabajo justo y equitativo.
Agradecemos la información a los abogados laborales del despacho Diez de Bonilla Kuri y Asociados S.C. y esperamos que este articulo te sea de utilidad.
