Indudablemente las situaciones difíciles llevan muchas veces a tomar decisiones duras y complejas. En el caso de las empresas, se cumple cabalmente. Por mala fortuna, algunas empresas caen en una debacle económica que por más que lo intenten, no logran salir a flote.
Para evitar ello, los gerentes y administradores deben tomar decisiones muy difíciles para intentar salvaguardar la integridad del negocio y evitar un daño irreparable. Probablemente, la principal alternativa que aplicaran será la reducción de personal, para así disminuir sus costes laborales.
En España hay un mecanismo especialmente creado para ello. Nos referimos al ERTE o Expediente de Regulación Temporal de Empleo. Se trata de un procedimiento donde la empresa despide de manera colectiva y temporal a sus trabajadores, suspendiendo temporalmente todos los contratos de trabajo. Esto se hace por problema económicos severos en la organización o si bien por alguna paralización obligatoria provisional.
Hemos preparado este artículo, para mostrarte todo lo que debes saber sobre el Expediente de Regulación Temporal de Empleo, desde de cómo funciona, para qué sirve, responderemos dos interrogantes muy comunes: qué ocurre cuando acaba un ERTE y si después de un ERTE te pueden despedir.
¿Qué es y para qué sirve un ERTE?
Comentábamos que, ERTE o Expediente de Regulación Temporal de Empleo, es un mecanismo implementado por empresas como salvavidas en caso de alguna recesión económica grave o alguna circunstancia que obligue a pausar la actividad comercial.
Es importante aclarar que, la gran diferencia entre el ERTE y el ERE es que el segundo, es un mecanismo definitivo y el primero temporal, tal y como su nombre lo indica. Cuando se aplica este procedimiento, el trabajador sigue siendo parte de la empresa, pero su contratado está suspendido de manera temporal. Es decir, no podrá ni recibir salarios, pagas extras o vacaciones.
Esta figura jurídica fue creada especialmente para cuando por razones específicas, sea necesario prescindir de parte de la plantilla o en su defecto reducir la jornada laboral por un tiempo determinado. Posteriormente, luego de solucionar los inconvenientes reincorporar a cada uno de los trabajadores afectados por el ERTE.
Tipos de ERTE
Ya adelantábamos que, existen dos tipos de ERTE, los cuales dependerán de la necesidad específica de la organización. A continuación, explicamos cómo funciona cada uno de ellos:
- Reducción de actividad laboral: este procedimiento jurídico permite al empleador modificar el contrato de los trabajadores para reducir la jornada o el número de días laborables. La ley permite desde reducir la jornada un 10% como mínimo hasta a un máximo del 70%.
- Suspensión de la actividad laboral: es quizás el mecanismo crítico donde la empresa suspende momentáneamente el contrato laboral. Como es de imaginar, esto es aplicado bajo circunstancias de fuerza mayor que realmente ameriten la aplicación del mecanismo. Entre ellas; interrupción grave del suministro de productos e insumos necesarios para el desarrollo de la actividad, cierre indefinido del espacio aéreo y de las fronteras del país, toque de queda o restricciones en la movilidad de la población, alguna situación sanitaria grave que ponga en riesgo la vida de trabajadores y consumidores, entre otras.
¿Qué ocurre cuando acaba un ERTE?
Cuando acaba un ERTE evidentemente como manda la ley, los trabajadores deberán regresar a su actividad y la empresa deberá asumir nuevamente las responsabilidades en cuanto a nómina, cotizaciones en la Seguridad Social y demás obligaciones como empleador.
En el caso de los contrates temporales que se han visto afectados por el ERTE, una vez la empresa regrese a la actividad, se deberá retomar durante el tiempo que les reste. Es decir, se debe poner en pasa el periodo estipulado en dicho contrato y reanudarlo, tomando como referencia el tiempo restante.
Esto hace que, en caso de que el empleador desee prescindir de los contratos temporales durante el ERTE, el trabajador podrá demandar y esta acción no será considerada justificada, sino que es en sí un despido improcedente o nulo.
¿Te pueden despedir después de un ERTE?
Una de las principales interrogantes de los trabajadores del ERTE es qué va a pasar luego de un ERTE, principalmente si pueden prescindir de sus labores. Para responder ello, hay que tener en cuenta diferentes factores. Inicialmente, hay que tener presentes que la aplicación del ERTE durante la pandemia por COVID-19 ha sido excepcional debido a las condiciones de la misma.
En primer momento, se reguló a través del Real Decreto-ley 8/2020, donde se estipularon algunas limitaciones en cuanto al despido de empleados en empresas que hayan aplicado el ERTE. Un mes después, se estableció una nueva cláusula en referencial al mantenimiento del empleo, precisamente para las empresas afectadas por la pandemia por COVID-19. La idea fundamental de esto era respetar el empleo durante los seis meses posteriores a la reanudación de la actividad.
Esto quiere decir que, al terminar el periodo del ERTE no se puede proceder a despedir o a dar de baja a ningún trabajador inscrito en la plantilla, sino que debe pasar por un período mínimo de 6 meses para poder prescindir e algún empleado.
Sin embargo, en el caso de que el daño económico en la empresa haya sido severo y que la empresa no pueda soportar de manera efectiva la carga salarial, podrá proceder al despido colectivo a través del ERE.
Como hemos visto, la aplicación del Expediente de Regulación Temporal de Empleo es un mecanismo que beneficia tanto a empleados como trabajadores. Esperemos que la duda que existe de cuando acaba un ERTE, haya sido despejada. Sin embargo, lo recomendable es asesorarnos con abogado especialista en material laboral.
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