Hace poco ha sido replanteada la ley de vientres de alquiler en Portugal. Esto se debe a que, después de un mes de haber sido confirmada, el Tribunal Constitucional de Portugal ha declarado que es ilegal debido a que no se protege el derecho de arrepentimiento.
Se alega que nunca ha tenido beneficios prácticos para el nacimiento. Sin embargo, el fallo a dicha ley ha sido mucho más rápido de lo previsto. Es importante destacar que durante el 2018 se ha presentado una situación similar de rechazo ante la misma razón.
El rechazo de la ley de vientres de alquiler
Pese a que los diputados ya habían recibido correcciones con respecto a la ley de vientres de alquiler en el que había sido destacado sus fallas, lo cierto es que estos no la corrigieron y directamente la enviaron al presidente de la República.
Tras la revisión del mandatario, este la mandó al Tribunal Constitucional de Portugal, quiénes, tras la correcta revisión, insistieron en que dicha ley era ilegal.
Alegaron que se viola el derecho del desarrollo de personalidad de la embarazada, además del principio de dignidad de la persona en cuestión.
La opinión del Tribunal
Pese a que la Constitucional no se niega a la ley de vientres de alquiler de forma propia, lo cierto es que sí desea que se mejoren algunos detalles que no afecten ni física, ni psicológicamente a los involucrados.
Insiste en que se deben guardar los derechos de la mujer que llevará la gestación, especialmente en el momento en que se desee arrepentir. Insiste en que el arrepentimiento puede llegar antes de la entrega a los padres adoptivos, por lo que, se deben proteger ávidamente.
A pesar de que se propuso extender el período viable del arrepentimiento de la gestante hasta el momento de la presentación civil, la ley de vientres de alquiler siguió intacta y no se modificaron estos detalles.
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