La misión que empezó hace tres días por fin terminó este martes cuando fueron rescatados los últimos de los doce niños y el entrenador que permanecían atrapados en una cueva en Tailandia. 18 días fueron necesarios para lograr este rescate; mismo que muchos consideran como milagroso por las condiciones en las que se trabajaron.
Fueron muchas las dificultades que debieron superar y correr básicamente en contra del tiempo; tomando el cuenta que con el paso de los días la cueva se inundaba cada vez más dejando prácticamente a los menores arrinconados. Ahora, los trece rescatados se recuperan en un hospital de la provincial de Chiang Rai.
Fueron necesarios 19 buzos para completar el rescate
Los rescatistas calificaron la tercera misión como la más complicada; en ella participaron 19 buzos de los cuales cinco eran nacionales. Después de cinco horas de iniciar el despliegue el primer niño salió y luego de nueve de actividades estaban los últimos atrapados fuera del agua.
El rescate dio inicio el domingo cuando los primeros buzos lograron sacar a cuatro niños; el lunes se hizo lo propio y este martes el final parecía estar cerca. Ahora solo queda esperar que se recuperen de estos terribles días que vivieron para que puedan volver a casa junto a sus familias.
Clases de natación antes del rescate
Desde todo punto de vista el rescate era sumamente complejo; tomando en cuenta las características del túnel de casi cuatro kilómetros hasta llegar a la cámara donde se encontraban. En algunos tramos era demasiado estrecho y el suelo era traicionero; luego de estudiar diferentes opciones para sacarlos, el hecho de entrar con buzos era la única viable. Desde que fueron encontrados por las autoridades el pasado cinco de julio los niños recibieron clases de natación para que pudieran nadar cuando fuese necesario.
El 23 de junio luego de un entrenamiento de fútbol, llegaron a la cueva Tham Luang; las razones se desconocen. Por esta temporada el ingreso a esta montaña está prohibido por las inundaciones que forman parte de la temporada de lluvias del mozón. Cuando estaban ya dentro una tormenta inundó el trayecto obligándolos a adentrarse mucho más. Debieron esperar nueve días hasta que las autoridades los ubicaran.
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