Google conocido como el gran buscador de Internet y como uno de los gigantes en el mundo tecnológico; ha visto luz verde a su oposición a rectificar en frente del fisco francés por la gran suma de 1.115 millones de euros por impuestos adeudados. Esta razón que fue otorgada por el Tribunal administrativo de París.
Determinando de esta manera que la sucursal Irlandesa del gigante de internet, encargado de las operaciones en el continente europeo, no es imponible en el país francés. La empresa estadounidense se vio en la necesidad de recurrir a la justicia. Esto lo hizo con la intención de reclamar que no está en la obligación de declarar sus entradas en Francia. La razón es que todos los beneficios los obtiene de su sucursal irlandesa Google Ireland Limited (GIL) mediante la venta de publicidad.
Fue el 14 de Junio cuando se le dio la razón mediante el relator público. Estimando que desde el punto de vista de las retenciones y de sus impuestos a las empresas; la empresa de Google France no se encontraba beneficiada. Google quien sostiene que los anunciantes deben firmar un contrato con su sucursal irlandesa aunque sus clientes tengan alguna relación con la empresa francesa, sostiene la noción de “establecimiento estable” necesaria para oficializarse como imponible en Francia
Respuesta de la administración fiscal a Google
La administración fiscal declaro que los empleados son parte fundamental en la venta de publicidad en el país francés. Por ello alegan que es una de las piezas claves para hacer eficiente su sistema de búsqueda; aunque por más que trabajen en Francia y sean Franceses sus contratos son de la sucursal francesa. Irlanda se ha convertido en un imán para las grandes empresas por su baja tasa de imposición. Siendo no solamente Google si no varias multinacionales más las que se sienten atraídas por lograr la optimización fiscal.
El sistema es sencillo y consiste en instalar primero diversos acuerdos fiscales. Luego se establecen oficinas en diversos territorios que ofrecen esta facilidad de imposición; siendo en 2014 cuando se conoció el primer caso con la famosa empresa de LuxLeaks quien revelo este sistema de evasión fiscal aplicado al Gran Ducado de Luxemburgo. Achacándoselo a las ayudas estatales hacia las empresas, se empezó a distorsionar las reglas de la competencia legal y por lo tanto se obtuvo la legalización del mismo aun siendo investigadas y autorizadas por una Comisión Europea.
